¿Qué es una auditoría energética?
En los últimos años ha crecido el interés por las auditorías energéticas debido a la mayor comprensión del impacto humano sobre el calentamiento global y el cambio climático. Esta herramienta tiene el propósito de elaborar un diagnóstico de medidas prácticas con el fin de mejorar los costes y la rentabilidad a corto, medio y largo plazo. Se ha convertido en un método fundamental para la eficiencia y el ahorro energético.
Pero ¿de qué se trata exactamente una auditoría energética? Se entiende por auditoría energética el método a través del cual se puede adquirir información objetiva y fiable acerca del consumo de energía de un determinado edificio, para conseguir descubrir qué factores influyen a dicho consumo. De esta forma, podremos comprender de qué manera se está usando la energía y así poder reconocer dónde se puede estar desaprovechando para poder plantear y planificar estrategias factibles de ahorro energético.
Una auditoría energética es uno de los procedimientos más inteligentes, útiles y efectivos para lograr un considerable ahorro energético, y, en consecuencia, ser parte activa en el cuidado del medio ambiente, a la vez que se consigue reducir el importe de la factura mensual.
Las personas encargadas de realizar las auditorías energéticas son los auditores energéticos, cuyo perfil es el de un profesional multidisciplinar con altas nociones de las exigencias energéticas de un edificio.
¿Cuándo realizar una auditoría?
Si estás buscando oportunidades de ahorro, una mayor eficiencia energética y un cuidado del medio ambiente, realizar una auditoría energética es un buen comienzo. Si contratas un servicio de este tipo, nuestro equipo de profesionales se encargará de todos los procesos y requisitos a cumplir para alcanzar las recomendaciones más eficaces en el ahorro de energía.
¿Por qué son tan importantes?
La realización de auditorias energéticas son importantes para disminuir los costos del servicio energético y proteger la vida útil de los equipos. También, para mejorar el rendimiento de equipos o implementar sistemas de automatización. Asimismo, permiten mantener el control y la supervisión de los mismos. Todo ello nos permite un ahorro considerable en la factura de la luz y, además, formar parte del cambio hacia la protección del medio ambiente.
Requisitos y objetivos de las auditorías energéticas
Las auditorías energéticas persiguen evaluar el comportamiento del consumo de energía en las instalaciones e identificar dónde y cuándo se hace uso de ella, cuánto se consume y cuánto cuesta. También, posibilitan reconocer oportunidades de ahorro y qué potencial guardan.
El Real Decreto 56/2016, establece como obligatorio la realización de auditorías energéticas de grandes empresas cada cuatro años, entendiendo por tales tanto las que ocupan al menos 250 personas como las que, tienen un volumen de negocio que sobrepasa de 50 millones de euros, y a la par, un cómputo general que sobrepase de 43 millones de euros.
¿Qué necesitas saber?
- Las auditorías energéticas deben ser realizadas por auditores cualificados.
- Los datos de consumo de energía y electricidad deben estar actualizados, medidos y verificables.
- Estas evaluaciones se basarán en el estudio del coste del ciclo de vida antes que, en periodos simples de amortización, con el propósito de obtener información acerca de los valores residuales de las inversiones a largo plazo y de las tasas de descuento.
- Deben contener un examen del perfil de consumo de energía de los edificios, instalaciones, de las operaciones comerciales, y de las flotas de vehículos o del transporte empleado dentro de las instalaciones de la empresa.
- Para obtener una imagen fiable del rendimiento energético general, las auditorías deben de ser proporcionadas y representativas.