Instalaciones eléctricas de baja tensión

Las instalaciones eléctricas son conjuntos de circuitos eléctricos cerrados que se utilizan para transportar la energía eléctrica, de manera que eso permita la ejecución de distintas funciones, procesos y actividades. A pesar de que existen diferentes tipos de instalaciones eléctricas de acuerdo con su uso o su tensión, todas coinciden en su principal cometido que es el traslado de la energía eléctrica desde los elementos productores hasta los elementos consumidores. Antes de comenzar a hablar sobre instalaciones eléctricas de baja tensión, conviene mencionar el concepto de tensión eléctrica, nombre que recibe la magnitud física de mide la diferencia del potencial eléctrico entre dos puntos o, dicho de otro modo, el voltaje mediante el que la electricidad transita de un cuerpo a otro a través de la medida conocida como voltio. En Lodeal Energía materializamos proyectos de montajes eléctricos de baja tensión adaptándonos a las necesidades de cada cliente.

¿Qué es una instalación eléctrica de baja tensión?

Las instalaciones eléctricas de baja tensión son aquellas que generan o distribuyen energía eléctrica para pequeños consumos como es el uso particular de viviendas o incluso para el alumbrado de las calles. Por ello, se consideran de baja tensión aquellas instalaciones que producen energía para consumo propio. En consecuencia, su potencia será menor, siendo inferior o igual a 1kV, lo que es equivalente a 1000 voltios. También, se puede distinguir este tipo de instalaciones porque reciben una corriente igual o inferior a 1,5kV de forma continua. Este tipo de sistemas eléctricos son normalmente utilizados para convertir la energía eléctrica en otro tipo de energía, ya que un importante número de receptores eléctricos están diseñados para el funcionamiento a baja tensión.

¿Cuáles son los sistemas considerados de baja tensión? ¿Dónde se utiliza la baja tensión?

Como antes adelantábamos, en España se considera baja tensión cuando la instalación eléctrica genera o distribuye energía eléctrica para consumo propio, cuando es receptora de corriente alterna igual o inferior a 1kV o cuando es receptora de corriente continua igual o inferior a 1,5kV. La baja tensión se suele emplear para el consumo propio en el hogar, la industria y el alumbrado público.

Normativa de instalación y mantenimiento.

Para asegurarnos de que una instalación eléctrica de baja tensión cumple con los requisitos de seguridad pertinentes tenemos a nuestra disposición el Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión (REBT) para así tener garantizado el cumplimiento de los criterios y normativas. En primer lugar, que el diseño de la instalación sea propuesto por profesionales habilitados para este tipo de proyectos. También, deben ser ejecutadas por instaladores autorizadas en baja tensión, quienes realicen, mantengan y reparen las instalaciones eléctricas según la reglamentación y seguridad pertinentes. Asimismo, al término de la ejecución, la empresa instaladora realizará las verificaciones y efectuará la solicitud de las licencias ante las administraciones necesarias. Tras su ejecución y respectiva verificación de que los resultados alcanzados son los deseados, se deberá mantener en buen estado la instalación realizada. Algunas empresas ofrecen un servicio de mantenimiento para las instalaciones eléctricas para así conservarlas en las mejores condiciones posibles.